En el día de hoy, nuestro profesor Pablo nos trajo un coche con un golpe en una aleta trasera derecha.
Para trabajar en ello lo primero que hicimos fue quitar el piloto trasero.
A continuación cogimos un gato hidráulico con una pinza e introducimos la pinza por el hueco de el paño del maletero.
Una vez que teníamos la pinza metida, bombeábamos el gato para que se abriese en el interior y empujase la chapa para fuera. Una vez surgían las tensiones en la chapa las aliviábamos con un martillo.
Debido a que la pinza tenia mucha fuerza nos hacia grietas en la chapa, quizá en las fotos no se vea con claridad pero están ahí. También podemos observar en la foto que en la zona baja, donde ajusta la aleta con la defensa, se forma un nervio por el golpe que es imposible de sacar con la pinza y con el martillo. En esa zona deberemos de utilizar la maquina de soldar por puntos de resistencia para tirar de ellos hacia fuera. Pero eso sera en la próxima clase porque en esta ya no nos dio tiempo a más....
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